La industrialización impuso una demanda siempre creciente para mover líquidos de un lugar a otro por otro medio diferente a la gravedad. Para motivar a un líquido a moverse a través de tuberías y canales, debe proporcionarse energía a dicho líquido; esta energía, usualmente mecánica, provista por una fuerza motriz es transferida al líquido por medio de un dispositivo denominado bomba.
Las bombas industriales de engranajes internos Viking Pump mueven fluidos en cientos de miles de industrias en todo el mundo. Combinan una operación simple y fiable con la adaptabilidad para resolver problemas de bombeo inherente al principio «un engranaje dentro de otro.